Completada nuestra espectacular excursión a las cataratas Niagara toca despedirnos. Y lo hacemos con cierta tristeza pero sabiendo que esa sensación es sólo posible porque hemos hecho bien las cosas.
Ha sido un mes donde los alumnos han tenido que superar ciertos retos: el reto de una nueva cultura, de una lengua que han tenido que poner en práctica día tras día, el reto de integrarse en una familia que no conocían de nada. Y lo han superado con matrícula de honor. Para que un programa complejo de estas características funcione no es suficiente con sólo tener excelentes familias, profesores entregados, buenas excursiones o una buena organización interna. Lo fundamental de todo es que los miembros del grupo estén a la altura. Vuestros hijos lo han estado y podéis estar orgullosos de que han aprovechado este mes lo máximo posible.
Agradecimientos a las familias Canadienses, la organización local, CLS, a todos vosotros por vuestro apoyo y todos los que han hecho posible que esta aventura resulte memorable. Al grupo les tengo que decir una cosa: os perdona vuestro lamentable gusto musical que he tenido que soportar en nuestras excursiones en el bus porque sois muy buena gente…volvería a sufrir esas canciones porque merecéis la pena. ¡Os echaré de menos! Un fuerte abrazo!
