Buenos días desde el caluroso Fort Lauderdale.
Después de un largo viaje, por fin llegamos a destino, donde nos estaban esperando nuestras familias. Nos dieron una bienvenida muy agradable, pero todos estábamos cansados, así que nos fuimos derechitos a la cama.
Ya tuvimos nuestra primera visita a la ¡playa! La temperatura del agua es increíble, no nos costó nada entrar en el agua, nos costó más salir para volver a casa. ¡Estábamos tan a gusto…!
Al lado de la playa, había una cancha de baloncesto y nuestros chicos aprovecharon para echar una partidita a la que terminaron uniéndose otros chavales americanos. Un partido internacional tremendamente divertido.
Primeros días fantásticos. Y hoy ¡más! Os seguiremos contando.