¡Hola a todos! ¡Toca despedirnos!
Si una cosa ha demostrado la fiesta de despedida de anoche – llena de palabras de agradecimiento y lágrimas entre los chavales y sus familias de acogida – es que en las semanas que el grupo ha estado aquí se ha producido algo especial que marcará sus vidas. Cuando por ejemplo ves a uno de los pequeños hermanos de acogida de Alejandra llorar desconsoladamente porque su “big sister” ya no estará con ella para acto seguido bailar con ella La Macarena, te das cuenta del impacto que vuestros hijos han tenido en las familias americanas.
Pero este afecto que han logrado no se ha producido de forma gratuita..se lo han ganado con su esfuerzo diario. Se lo han ganado esforzándose en hablar inglés en casa cuando lo más fácil hubiera sido ir a la habitación y whatsappear a un amigo/a. Se lo han ganado diciendo si a planes de las familias que seguramente no siempre les apetecía. Se lo han ganado con los pequeños detalles..ayudando en casa, contando anécdotas, educando a las familias sobre las particularidades de España etc. Pero sobre todo, se lo han ganado demostrando ser buena gente. Podéis estar orgullosos del rendimiento de vuestros hijos y saber que aquí en California dejan atrás una segunda familia que les apoyará en todo lo que tienen por delante.
Agradecimiento al grupo por hacer que mi trabajo sea fácil y siempre sacarme una sonrisa. Echaré de menos el divertidísimo sentido del humor de nuestro colchonero Marcos, el delicioso sarcasmo de Celia, la alegría contagiosa de Victoria, la paz que transmite la presencia de Alejandra, el saber estar de esa chica agradablemente indescifrable llamada Lucia, las interesantísimas conversaciones sobre cine con nuestra Tarantiniana Elena y por supuesto Jaime..ese amante de la cultura japonesa que ha tenido el mes más complicado y que desgraciadamente no siempre ha sido comprendido pero que posee un corazón que muchos ya les gustarían tener. ¡Aunque no lo creas, te guardamos mucho cariño Jaime!
Gratitud con la organización local y CLS por encontrar unas familias estupendas y apoyarme en mi labor. Y por supuesto mil gracias a las familias por dar a vuestros hijos la posibilidad de vivir esta experiencia. Sin vosotros nada de esto hubiera sido posible. ¡Nos vemos en Madrid!