Un curso de verano es una forma única de hacer amigos de todo el mundo. Vivir en una residencia internacional, una experiencia única.
Todos nuestros cursos residenciales tienen lugar en instalaciones de alto confort. A ellas asisten estudiantes de muy diferentes partes del mundo, creando un ambiente cosmopolita y diverso. El uso del inglés es obligado ya que la vida y todas las actividades se realizan en este idioma. Además, los estándares de las clases de inglés son excepcionales.
Monitores de CLS y coordinadores locales, acompañan y supervisan cualquier necesidad de cada estudiante.